Vivienda de Marca
Quisimos resolver la crisis de vivienda todo este tiempo recurriendo al gremio de los arquitectos, cuando a quien había que llamar era al dueño de ZARA.
La crisis de vivienda en la Ciudad de México es una cara de la polarización: por un lado no hay vivienda asequible, y por el otro la que tenemos ya va a ser de marcas de lujo.
Cuando me dijeron eso, pensé que por “marca” se referían a “Enrique Norten” o “Frida Escobedo”, que son los y las arquitectas de renombre, pero no. Marca, marca de las buenas: Louis Vuitton, Armani, Balenciaga, y esas que vemos en los centros comerciales o en las cangureras y chamarras de tanta gente.
Sigo sorprendido. Si hoy se ofrece un penthouse diseñado por Frank Gehry, por Gaudí, o por Agustín Hernández, éste va a ser cotizado por algunos conocedores. Pero, si avisamos que un edificio entero en Masaryk será intervenido por Giorgio Armani, los clientes se los van a arrancar de las manos. Esto debía ser una crisis existencial para los arquitectos.
Y eso es exactamente lo que está pasando. En Masaryk, la principal calle de Polanco y el segundo corredor comercial más exitoso de la CDMX, hay un proyecto residencial que llevará el nombre del diseñador italiano. Ya vas a poder llevar tu cangurera, tu playera negra y tu depa con el nombre del diseñador.
En Bosque Real, la marca “Roche Bobois”, conocida por sus diseños de mobiliario de lujo, patrocinará 46 viviendas en 5 torres “exclusivas”. Cada una ronda los cuarenta y tantos millones de pesos (~ USD 2 millones).
Esto no es nuevo. A nivel mundial la tendencia en real estate es en esa dirección. Ya hay proyectos inmobiliarios de Dolce&Gabanna, de Lamborghini, Pagani y hasta de la revista Elle. Estos proyectos, de Armani y Roche Bobois, son sin duda los primeros de varios que surgirán en los años que vienen. Si los dejan, claro. Porque la tramitología y los obstáculos al desarrollo urbano en la Ciudad de México son muchísimos.
Yo me pregunto si la vivienda social dejará de llamarse así y ahora serán los “Pisos de ZARA” u “Hogares H&M”. Me pregunto si las colonias de clase media tendrán los emblemas de Tommy Hilfiger. Pensar que recurrimos a la gente equivocada todo este tiempo. Tal vez Inditex y el esposo de Salma Hayek arreglan la crisis de vivienda que ni los arquitectos ni los políticos han podido resolver.